La ciudad de Almería → Almería histórica

El complejo del castillo, de origen musulmán

En época Prehistórica, en un periodo que podría situarse en la Edad del Bronce, el cerro de la Alcazaba ya estaba poblado por pequeñas comunidades. Después tanto fenicios como romanos utilizaron el fondeadero natural para el intercambio de mercancías.
Los primeros vestigios de la Almería musulmana se remontan al siglo IX, cuando Abd al-Rahman mandó a un grupo de yemeníes la vigilancia de la costa a fin de impedir los desembarcos de los normandos. En aquella época la actual ciudad de Pechina (Bayyana en árabe) era una floreciente colonia formada por la mezcla de población autótona y musulmanes, y su barrio marítimo era Almería. Precisamente donde hoy se encuentra el tercer recinto de la Alcazaba había una torre de vigilancia llamada Al-mariyar Bayyana (Atalaya de Bayyana) y de ahí procede el nombre de Almería.

Interior de la Alcazaba

La ciudad fue fundada en el año 955 por Abderramán III convirtiéndose en una de las grandes capitales del Al-Ándalus y puerto principal. Su esplendor llegó con la declaración de reino independiente en el año 1012 creándose la Taifa de Almería. Los vestigios de esta época musulmana de la ciudad pueden encontrarse por todo Almería pero la más significativa es la Alcazaba que fue la mayor fortaleza construida por los musulmanes en España.
En el año 1489 la ciudad fue conquistada por los reyes católicos dando por finalizada la época musulmana. En el año 1522 un enorme terremoto destruyó gran parte de la ciudad, incluyendo el puerto, Esta catástrofe hizo que Almería se sumiera en un profunda crisis que duraría casi tres siglos. Parte de la población abandonó la ciudad y al no contar con un puerto en condiciones Almería fue excluida, prácticamente, del próspero negocio del comercio con las indias.
En el siglo XIX se inició la recuperación económica con la minería y la exportación de cítricos y uva. En esta época fueron construidos edificios importantes de la ciudad, como algunos palacetes del Paseo y el Cable Inglés. La segunda mitad del siglo XX ha supuesto el crecimiento y mejora de la ciudad gracias a los dos motores económicos de la provincia, el cultivo en invernadero y el turismo.

La catedral al anochecer