Valle del Almanzora → Vélez Blanco

Vélez Blanco, vista desde la iglesia de la Magdalena a la antigua morería musulmana
Vélez Blanco, barrio de la Morería
Vélez Blanco, Mirador Collado de Arenas
Vélez Blanco, vista desde la iglesia de la Magdalena a la antigua morería musulmana Vélez Blanco, barrio de la Morería Vélez Blanco, Mirador Collado de Arenas

Con las impresionantes montañas como telón de fondo, Vélez Blanco aún ocupa una posición estratégica en la provincia. Se dice que este lugar fue utilizado por los Nazaríes para reforzar la frontera del Reino de Granada. La ciudad fue finalmente entregada pacíficamente a los Reyes Católicos en 1488, lo que quedó inmortalizado en la sillería del coro de la Catedral de Toledo. La herencia morisca está profundamente arraigada en Vélez Blanco. Aquí se conserva casi íntegramente la estructura urbana, con especial énfasis en el barrio de la Morería y las fuentes.
Si hay un adjetivo que describe el lugar es monumental, por el rico patrimonio que se conserva entre sus muros. Los restos más antiguos se remontan a la prehistoria, con las Cuevas de Ambrosio, importante yacimiento del Paleolítico superior, o el Cerro de las Canteras, donde se encuentran los restos del mayor poblado y la necrópolis neolítica, presente en toda la península.
Las casonas de piedra y ladrillo con influencias barrocas se ubican en las principales calles de la ciudad, con especial atención a la Casa de los Baños o Casa de los Serna, que conserva un altar donde se celebró la primera misa tras la conquista cristiana.

Vélez Blanco, Fuente Caños de Caravaca
Ermita de la Virgen de la Cabeza con vistas a la Sierra
Parque Natural Sierra María-Los Vélez
Vélez Blanco, Fuente Caños de Caravaca Ermita de la Virgen de la Cabeza con vistas a la Sierra Parque Natural Sierra María-Los Vélez

Si hay una visita obligada es la del castillo-palacio del Marqués de los Vélez. Construido a principios del siglo XVI, el proyecto fue encargado a arquitectos italianos por el primer marqués de la ciudad, Pedro Fajardo. Fue declarado monumento histórico (1931). Sólo se ha conservado el exterior de la fortaleza, ya que las decoraciones interiores fueron vendidas (hoy se pueden ver en el Museo Metropolitano de Nueva York). Se divide en dos partes: la estructura rectangular de ladrillo de la antigua Alcazaba y el cuerpo principal de mampostería, que actualmente se encuentra en proceso de restauración.
Parte del término municipal de María pertenece al parque natural del mismo nombre, lo que significa que en este pueblo, situado en una meseta, los inviernos son gélidos y nevosos y los veranos calurosos y cortos. Ubicada a más de mil metros sobre el nivel del mar, María ofrece al visitante un espectáculo visual tan impresionante como el de sus campos de cereales, ya que ésta es la mayor productora de granos de la provincia, cuyo color cambia según las estaciones. Sin duda un buen marco para la tradicional romería de la Virgen de la Cabeza.
Los famosos embutidos se complementan con un interesante patrimonio, entre el que destacan las pinturas rupestres de la Cueva de Haza y el poblado ibérico de El Pasico.
Como ejemplo de arquitectura religiosa encontramos la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Encarnación. Esta iglesia data del siglo XVI y destaca su artesonado de estilo mudéjar y la portada con columnas, arcos de medio punto y marco decorativo rectangular que encierra un reloj de sol. El edificio cuenta con una torre cuadrada rematada por una veleta, con cuatro campanas y un reloj del siglo XIX.